lunes, 20 de noviembre de 2017

Carta 1

Hoy es el segundo día que veo que todo ha cambiado.
Es el día en el que debería estar contigo pero te he dejado marchar, o me he permitido huir.
Hoy te apareces en mi mente a cada dos pasos, y cada paso es un recuerdo, y cada recuerdo es un puñal. Ya no son dudas, me mantengo, pero sí que es dolor. Me rompo en mil trozos cuando pienso que puede que no vayas a estar bien, que es posible que no vaya a ser tu más feliz cumpleaños, me parte...
Te aparté de mi lado poniendo tiritas en cada grieta que me iba apareciendo, con cada palabra, frase, lugar, mirada, número... con cada cosa que me recordaba a ti. Tú, por supuesto que tú, me ayudaste a tirar de ellas una a una, fuerte y sin dolor, poniéndomelo fácil, como siempre...
Yo soy tu piedra.